Era día 19 de Junio de 2009, se cumplían diez años de la adhesión por parte del Estado español a la Declaración de Bolonia y al oculto plan privatizador y mercantilizador que trae consigo este conflictivo plan universitario.
Estudiantes de todas las regiones y zonas del panorama estatal decidieron juntar fuerzas, aunar esfuerzos y dar un último golpe simbólico para finalizar el año. Un golpe simbólico, que pretende señalar que el movimiento asambleario antibolonia sigue vivo, y que el año que seguirá “incordiando” a las autoridades políticas y reivindicando algo tan justo y noble como un debate público y real en el que se decida el sobre el futuro de la universidad.
Alrededor de las 8 de la mañana, y tras una noche conjunta en un centro social de la Comunidad de Madrid, los estudiantes antibolonia empezaron a acudir a la zona elegida, situada en torno a la c/ Alcala, el Ministerio de Educación.
Un grupo de estudiantes era el encargado de introducirse en el interior del edificio institucional y realizar el acto simbólico. Otro grupo de estudiantes aguantaba fuera.
Y así sucedió, consiguieron entrar y tras un período de cierta tensión, se cerraron las puertas y echaron fuera a determinados encargados de prensa, cuya labor consistía en dar cobertura informativa a una acción social. Pero aún así, y a pesar de sus intentos de ocultar lo sucedido, se realizo una gran labor informativa y de difusión con fotos, videos.. Compañeros de medios independientes desempeñaros una esplendida tarea y mostrando así su apoyo a las luchas sociales y populares.
Al poco tiempo, miembros Antidisturbios de la Policía Nacional, acudieron al lugar de lo sucedido. Al menos 6 lecheras aguardaban en la entrada del edificio. 3 miembros de las fuerzas del estado penetraron en el edificio, donde se hallaban los estudiantes. Comenzaron a identificar a los estudiantes que se encontraban fuera del edificio.
Fuera del Ministerio, otro grupo de estudiantes, en torno a unos 15, mostraban su apoyo y solidaridad con los compañer@s de dentro, que se encontraban sentados en el Hall de entrada con una actitud totalmente pacífica y reivindicativa. Se coreaban himnos y cánticos contrarios a Bolonia que provenían de las dos partes, del interior y del exterior. Afuera, los miembros de apoyo repartían panfletos entres los ciudadanos que se acercaban y pasan por el lugar y portaban una larga y amplia pancarta que hacía referencia al Cumpleaños de Bolonia: “Dećimo aniversario de Bolonia: feliz cumple, pero ni uno más. Seguimos en lucha"
Finalmente acudieron los medios convencionales, TVE se presentó en la puerta y entrevistó a varios encargados de prensa. El panorama seguía parecido, hasta que los cuerpos del estado, indicaron a los compañeros de apoyo que abandonaran el lugar en el que se encontraban y se colocaran en la acera de en frente. Así fue. Desde la acera al otro lado del Ministerio, se continuaban lanzando voces en contra de Bolonia y en apoyo a los compañeros que permanecían dentro.
Alrededor de las 10 :45 horas de la mañana comienzan a salir los activistas que se encontraban en el interior del edificio, portando una larga pancarta en la que podía leerse:“ Bolonia cumple 10 años, Ni uno mas”.
Acto seguido, los dos grupos se unieron en torno al Ministerio y comenzaron la lectura del comunicado final.
Una acción que pudo salir adelante gracias al compromiso, esfuerzo y participación activa de las estudiantes que decidieron dar un último golpe de gracia, y reafirmarse en las posturas y planteamientos que llevan defendiendo desde hace ya bastante tiempo.
Esta acción pretende ser un acto simbólico, un llamamiento a la continuidad de la lucha y una llamada de aviso y atención: seguimos ahí, con más fuerza aún si cabe. No vamos a parar de protestar y de actuar por aquello en lo que creemos. No cesaran huelgas, manifestaciones, en cierros, acciones mediáticas y ocupaciones simbólicas si son necesarias mientras nuestras demandas no sean escuchadas y tenidas en cuenta en un aspecto social tan relevante como es la educación.
Bolonia cumple diez años, ni uno más!!
Seguimos en la lucha.